Cuando llegue ese dia,
donde el espejo del salón de mi casa,
donde cuelgo la ropa,
y seco los sueños,
se convierta en cristal,
empezaré a ver las calles,
que tanto se parecían a ella.
Mientras tanto,
solo veré su recuerdo,
cuando me prepare para salir,
a romper todos los planes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario